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AGRADEZCO


Agradezco ser juzgado, agradezco ser odiado.

Agradezco ser amado, agradezco ser olvidado.

Lo que yo más agradezco es haber conocido el dolor y la tristeza,
pues gracias a ellos tengo la destreza
de plasmar con mis letras
lo que siento,
lo que pienso.

No uso máscaras, no uso mentiras.
Uso mis palabras, uso mis retinas,
uso mis ganas, uso mis deseos,
uso mis recuerdos, uso mis sueños.
Uso mi vida, uso la tuya…

Repito una y mil veces la misma palabra,
pero no me importa.

Repito y repito pero no me importa.

Te cuento:
«Yo escribo principalmente para mí.
Si a mí no me molesta lo que escribo,
pues para mí está bien».

-Bogotá, 2015-
Nodier Vallejo

Comentarios

Un escrito destacado:

DESCANSA TRANQUILO

Cansado de vivir en este lugar, fue a beber nuevamente a la oscura Cueva del duende. Pidió una jarra grande de chichón y una jarra grande de cerveza. Pidió una jarra vacía para poder mezclar las dos bebidas y hacer el famoso refajo santandereano. Acabó las dos jarras de bebidas demasiado rápido para lo que uno acostumbra a ver en este tipo de lugares.  -¿Por qué vivir?-, preguntó en voz alta y con ese característico tono de borracho. -¿Por qué vivir?, o sea, ¿qué sentido tiene vivir? ¿Para qué vives?-, continuó, mientras con las manos indicaba al cantinero que le llevara una orden igual a la anterior. –La vida es la no necesidad de existir, es no querer existir-. El cantinero, quien trataba de estar atento a estas palabras mientras hacía maromas para atender las otras mesas, le dejó lo solicitado en la mesa frente a él.   Miró lo que le trajeron. Bufó, suspiró, miró las botellas de bebidas alcohólicas en el estante de enfrente como si fuera un vacío de los que absorben el alma.  -La vi